Para el cumplimiento de los cuatro objetivos estratégicos definidos en el PE, el PMP 2014-2018 plantea un nuevo modelo de cooperación técnica orientado hacia el logro de resultados, haciendo un uso intensivo de todas sus capacidades técnicas, experiencia y recursos del Instituto.
Este documento dentifica y tipifica diferentes estrategias y mecanismos innovadores que han sido aplicados en distintos escenarios para aumentar la cobertura y facilitar el acceso de los agricultores familiares a esos servicios, los que pueden servir de referencia para otras iniciativas que se quieran impulsar en ese sentido, bien sea para mejorar la calidad y eficiencia, o para aumentar la oferta de esos servicios.
Este programa está basado en una lógica de intervención productiva, que orienta y privilegia sus acciones y esfuerzos a la creación y fortalecimiento de cadenas de valor específicas. Durante su ejecución, el programa contribuirá a aumentar el nivel de competitividad de cada uno de los productos definidos y priorizados por las estrategias nacionales de desarrollo del Gobierno de El Salvador.
En este documento dos modelos asociativos, cooperativa y asociaciones de productores, son examinados con la finalidad de recoger las fortalezas, debilidades, oportunidades, amenazas, factores de éxito y lecciones aprendidas que resultan del análisis de la estructura, modelo de gerencia, cadena de valor, alianzas, estrategias socioempresariales, de cuatro organizaciones agroempresariales rurales, cuya experiencia ha llamado la atención y ha sido objeto de seguimiento por parte de diferentes instituciones nacionales e internacionales promotoras del de desarrollo rural, como referente de éxito
Projet pilote, l’initiative Adaptation Learning Program (ALP) ou Programme d’Apprentissage sur l’Adaptation au Changement Climatique, est mis en œuvre pour une durée de cinq ans (2010-2014) à l’échelle de quatre pays subsahariens : Ghana, Kenya, Mozambique et Niger. Cette phase est conçue et mise en œuvre par Care et ses partenaires dans le but de « Renforcer la capacité des ménages vulnérables en Afrique sub-saharienne à s’adapter à la variabilité et au changement climatique à travers une approche d’adaptation à base communautaire (ABC) ».
El objetivo central de la estrategia es alcanzar la seguridad alimentaria de los más de cuatro millones de pequeños productores rurales e incrementar su productividad, alcanzando la sustentabilidad en el largo plazo, por medio de una estrategia que garantice la operación eficiente de una red de extensión rural con enfoque territorial que incremente sustantivamente la cobertura de los servicios.
l presente libro tiene el propósito de servir de guía al conjunto de acciones que deben redundar en el posicionamiento de la política de extensionismo, creando un ambiente favorable para consolidar la implementación de una política consistente de Extensionismo Rural con Enfoque Territorial. El proceso de difusión de las bases de la política de extensionismo debe enfocarse en los lineamientos establecidos, sistematizados con la intención de lograr un posicionamiento claro entre todos los actores responsables de su implementación.
El Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) tiene como misión proveer esquemas de cooperación técnica a sus estados miembros en el continente americano. El documento que aquí se presenta sintetiza los resultados de la segunda fase del trabajo de la Red para la Gestión Territorial del Desarrollo Rural, la cual es un proyecto de cooperación técnica entre la SAGARPA, a través del INCA RURAL, y el IICA.
A lo largo de su historia, los servicios de Extensión y Asistencia Técnica en América Latina y el Caribe han sido un instrumento focalizado, mayormente, hacia la pequeña agricultura como una forma de mejorar las condiciones de vida en el entorno rural y llevar tecnologías (conocimientos) que sirvan no solo para aumentar la productividad, sino que devengan en un motor del desarrollo y un medio para alcanzar la seguridad alimentaria.
It is often assumed that voluntary sustainability standards – such as Fairtrade – could not only improve the socioeconomic wellbeing of smallholder farmers in developing countries but could also help to reduce negative health and environmental impacts of agricultural production. The empirical evidence is thin, as most previous studies on the impact of sustainability standards only focused on economic indicators, such as prices, yields, and incomes.