La agricultura familiar de los países del Sur constituye uno de los sectores más directamente afectados y amenazados por los cambios climáticos. La cuestión de la adaptación, y en particular, la de la adaptación de la agricultura, ha ido ganando terreno en el transcurso de la última década en las agendas políticas nacionales e internacionales.
Providing farmers with essential agricultural information and training in the era of COVID-19 has been a challenge that has prompted a renewed interest in digital extension services. There is a distinct gender gap, however, between men’s and women’s access to, use of, and ability to benefit from information and communication technologies (ICTs).