Rather than merely supporting R&D and strengthening innovation systems, the focus of innovation policy is currently shifting towards addressing societal challenges by transforming socio-economic systems. A particular trend within the emerging era of transformative innovation policy is the pursuit of challenge-based innovation missions, such as achieving a 50 % circular economy by 2030. By formulating clear and ambitious societal goals, policy makers are aiming to steer the directionality and adoption of innovation.
This paper reflects on the experience of the Research Into Use (RIU) projects in Asia. It reconfirms much of what has been known for many years about the way innovation takes place and finds that many of the shortcomings of RIU in Asia were precisely because lessons from previous research on agricultural innovation were “not put into use” in the programme’s implementation. However, the experience provides three important lessons for donors and governments to make use of agricultural research: (i) Promoting research into use requires enabling innovation.
This paper reflects on the experience of the Research Into Use (RIU) projects in Asia. It reconfirms much of what has been known for many years about the way innovation takes place and finds that many of the shortcomings of RIU in Asia were precisely because lessons from previous research on agricultural innovation were “not put into use” in the programme’s implementation. However, the experience provides three important lessons for donors and governments to make use of agricultural research: (i) Promoting research into use requires enabling innovation.
This shift in thinking will require major shifts in policy, research, and investment. But where should these investments go? What foundations should be strengthened? Which gaps need filling? What’s working? What’s not?
In order to answer these questions in an informed way, we need to examine the evidence that exists and identify areas where more research is needed.
But this is easier said than done.
The evidence base on agri-food systems is growing exponentially. The CoSAI-commissioned study, Mining the Gaps, applied artificial intelligence to mine more than 1.2 million publications for data, creating a clearer picture of what research has been conducted on small-scale farming and post-production systems from 2000 to the present, and where evidence gaps exist.
En la región andina está creciendo la necesidad por sistemas de I&D orientados al cliente, que incluyan la participación de los grupos sociales involucrados.
Este libro busca Identificar la capacidad institucional (pública y privada) de contribuir al fortalecimiento empresarial y asociativo de productores y agroempresarios; Construir instrumentos de gestión del conocimiento (bienes públicos) que permitan fortalecer la capacidad institucional de apoyar el desarrollo agroempresarial y asociativo de los productores, con base en el estudio de la realidad de los “países bandera”, así como en el análisis de otras experiencias exitosas; Desarrollar, y validar, arreglos e instrumentos institucionales, y Diseñar una estrategia para promover la difusión
El concepto de desarrollo sostenible (DS) tiene como punto de referencia el Informe de la Comisión Bruntland, donde se le describe como un “proceso capaz de satisfacer las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer las suyas” (ONU,1987). Desde esa perspectiva, el desarrollo económico y el uso racional de los recursos naturales están inexorablemente unidos en el tiempo y el espacio.
En el presente trabajo se presenta un estudio de la implementación del Fitomejoramiento Participativo en Cuba, una metodología sustentada sobre la base de la experiencia adquirida por un grupo de investigadores, agricultores y técnicos. La propuesta presenta en materiales y métodos las cuatro fases fundamentales de este proceso: 1) Diagnóstico, 2) Colección de recursos fitogenéticos, 3) Establecimientos de parcelas demostrativas y desarrollo de ferias de diversidad y 4) Experimentación campesina.
La metodología busca identificar las debilidades a lo largo de las cadenas agroalimentarias que llevan a la pérdida de alimentos (pérdidas de poscosecha) y, a su vez, elaborar propuestas para mejorar la eficiencia de dichas cadenas a partir de la identificación y la formulación de soluciones. La aplicación de esta metodología por los diferentes actores es un primer paso para la reducción de pérdidas de alimentos