América Latina es una región muy heterogénea en términos de los niveles de desarrollo de los países y la madurez de sus SNI. Sin embargo, la región tiene una característica común que cruza desde la Patagonia hasta el Río Grande y desde el Pacífico hasta el Atlántico: es muy desigual socialmente hablando. Después de décadas de esfuerzos por avanzar más rá-pidamente en la senda del desarrollo, América Latina sigue siendo la región más desigual del mundo.
En los últimos 25 años se han producido cambios significativos en la vida rural de América Latina, en sus dimensiones política, económica, social, laboral, demográfica, cultural y ambiental, a partir de lo que se denominó los Programas de Ajuste Estructural y de las decisiones políticas y económicas que tomó cada país en particular. Uno de los elementos centrales y determinantes de las reformas en los Sistemas de Extensión y Transferencia de Tecnología Agraria (SETTA) ocurrió a partir de fines de la década de los setentas y principios de la década de los ochentas.
El presente artículo tiene como objetivo analizar el caso específico del programa “Formación y capacitación para mujeres campesinas” del Instituto de Desarrollo Agropecuario de Chile, ejecutado en convenio con la Fundación para la Promoción y el Desarrollo de la Mujer. Lo anterior mediante la descripción de los principales elementos del programa, así como la caracterización de sus beneficiarias en un área específica.
En esta publicación, el IICA recopila las principales características de los servicios de extensión rural de nueve países latinoamericanos, presentadas en la cita efectuada en México, así como un repaso por dos redes regionales de investigación en esta área. Con este documento, el Instituto confía en aportar a sus Estados Miembros una herramienta valiosa para fortalecer el trabajo realizado por sus propias instituciones y extensionistas.
El presente documento es un conjunto de estudios realizados en 2015 en ocho países y es complementario al ya publicado en 2014 y reeditado/actualizado por el IICA en 2016 con el título “Políticas públicas y Agriculturas familiares en América Latina y el Caribe: balance, desafíos y perspectivas” coordinado por Eric Sabourin, Mario Samper y Octavio Sotomayor, considerando que el 2014 fue declarado Año Internacional de la Agricultura Familiar.
El presente trabajo analiza la cadena de valor de la tara del sur de la región Cajamarca, con la finalidad de identificar sus fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas, así como diseñar los lineamientos de un planeamiento estratégico de desarrollo concertado con los actores directos e indirectos.
Ce document présente la position de l’Organisation des Nations Unies pour l’alimentation et l’agriculture (FAO) et du Forum mondial pour le conseil rural (GFRAS) sur la place actuelle des services de vulgarisation et de conseil agricole et sur les chemins qu’elle devra suivre à l’avenir. Les résultats présentés dans le document sont destinés à mieux situer la vulgarisation compte tenu de l’avenir de la recherche agricole en faveur du développement.
This report assesses trends in investments, human resource capacity, and research outputs in agricultural R&D -excluding the private (for-profit) sector- in LAC. It is an update of Stads and Beintema (2009), covering a more complete set of countries and focusing primarily on developments during 2006-2012/2013.
The Sourcebook is the outcome of joint planning, continued interest in gender and agriculture, and concerted efforts by the World Bank, FAO, and IFAD. The purpose of the Sourcebook is to act as a guide for practitioners and technical staff inaddressing gender issues and integrating gender-responsive actions in the design and implementation of agricultural projects and programs. It speaks not with gender specialists on how to improve their skills but rather reaches out to technical experts to guide them in thinking through how to integrate gender dimensions into their operations.
Grants for agricultural innovation are common but grant funds specifically targeted to smallholder farmers remain relatively rare. Nevertheless, they are receiving increasing recognition as a promising venue for agricultural innovation. They stimulate smallholders to experiment with improved practices, to become proactive and to engage with research and extension providers. The systematic review covered three modalities of disbursing these grants to smallholder farmers and their organisations: vouchers, competitive grants and farmer-led innovation support funds.