After years of neglect, there is a renewed interest in agricultural mechanization in Africa. Since government initiatives to promote mechanization are confronted with major governance challenges, private-sector initiatives may offer a promising alternative. However, given limited scientific studies on such private-sector options such approaches are often viewed skeptically. One concern is that multi-national agribusiness companies take advantage of smallholder farmers. Another concern is that mechanization causes rural unemployment.
Over the last 10 years much has been written about the role of the private sector as part of a more widely-conceived notion of agricultural sector capacity for innovation and development. This paper discusses the emergence of a new class of private enterprise in East Africa that would seem to have an important role in efforts to tackle poverty reduction and food security. These organisations appear to occupy a niche that sits between mainstream for-profit enterprises and the developmental activities of government programmes, NGOs and development projects.
TAP and its partners carried out regional surveys in Asia, Africa and Central America to assess priorities, capacities and needs in national agricultural innovation systems. This document provides a Regional synthesis report on capacity needs assessment for agricultural innovation in Africa. FARA was selected as Recipient Organization by FAO to facilitate TAP implementation in Africa. This is mainly due to its position as the umbrella organization bringing together and forming coalitions of major regional stakeholders in agricultural research and development.
Good agricultural practices (GAPs) are an indispensable tool for risk management due to the close relationship between agriculture and climate, as well as the climate variability currently being experienced. The implementation of these tools, however, involves fostering innovation, increasing knowledge and giving stakeholders, small producers in particular, a holistic view, so that they may improve their production systems, increase their resilience, and ensure their sustainability.
En este artículo, representantes del sector público y privado y de organismos internacionales acordaron estrategias para dar impulso a un nuevo actor con un gran potencial, un proyecto llamado Plan Maestro del Agro de la Región Occidental (PMARO).
En el primer capítulo presenta los retos para la seguridad alimentaria y el cambio climático en México y el mundo, así como los compromisos internacionales de México para atender ambos desafíos.
La metodología busca identificar las debilidades a lo largo de las cadenas agroalimentarias que llevan a la pérdida de alimentos (pérdidas de poscosecha) y, a su vez, elaborar propuestas para mejorar la eficiencia de dichas cadenas a partir de la identificación y la formulación de soluciones. La aplicación de esta metodología por los diferentes actores es un primer paso para la reducción de pérdidas de alimentos
A lo largo de su historia, los servicios de Extensión y Asistencia Técnica en América Latina y el Caribe han sido un instrumento focalizado, mayormente, hacia la pequeña agricultura como una forma de mejorar las condiciones de vida en el entorno rural y llevar tecnologías (conocimientos) que sirvan no solo para aumentar la productividad, sino que devengan en un motor del desarrollo y un medio para alcanzar la seguridad alimentaria.
Este documento dentifica y tipifica diferentes estrategias y mecanismos innovadores que han sido aplicados en distintos escenarios para aumentar la cobertura y facilitar el acceso de los agricultores familiares a esos servicios, los que pueden servir de referencia para otras iniciativas que se quieran impulsar en ese sentido, bien sea para mejorar la calidad y eficiencia, o para aumentar la oferta de esos servicios.
Este fascículo metodológico trata de la siguiente tareas estratégicas:
• Articulación de actores y redes para la elaboración de la estrategia.
• Análisis sistémico del territorio.
• Formulación de una visión de futuro para el territorio.
• Identifcación de motores de desarrollo y objetivos estratégicos.
• Elaboración de planes a mediano plazo, programas e ideas de proyectos estratégicos.
• Concreción de acuerdos y alianzas para impulsar la estrategia.