Las prácticas de extensión rural constituyen uno de los elementos medulares de distintos programas y proyectos de desarrollo rural orientados a pequeños productores agropecuarios. Pese a la importancia de estas iniciativas y a la clara influencia de la dimensión psicosocial en su decurso, llama la atención que la psicología haya realizado escasas contribuciones a esta área temática.
Este documento trata de escuelas de campo y de cómo ayudan al desarrollo des capacidades.
Se presenta en este documento la metodología de Escuela – Empresa desarrollada por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural de Colombia – Programa Oportunidades Rurales- y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) en 2010, como respuesta a los desafíos de fortalecimiento en capacidades de microempresarios rurales en Colombia, con una perspectiva de aplicación circunscrita inicialmente a los temas de comercialización, pero con una proyección de aplicación más allá de esta temática.
La Red Nacional de Programas de Desarrollo y Paz, Redprodepaz, ha venido reflexionando sobre la importancia y el gran papel de la educación en la apuesta del Desarrollo Humano Integral y Sostenible liderada por los Programas y ha reconocido su vinculación con los aspectos relacionados con la democracia, el respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales, las aspiraciones de desarrollo económico, social, tecnológico y cultural, y el fortalecimiento de la propia identidad de los habitantes de un territorio.Los Programas Regionales de Desarrollo y Paz, PDP, han rechazado la exist
En esta serie de manuales se proponen acciones para el fortalecimiento de capacidades de gestión asociativa y agroempresarial. Para lograrlo, se presentarán instrumentos, experiencias y prácticas que han dado buenos resultados. Este saber acumulado surge de un conocimiento práctico que generaron otros productores y otros agentes estatales, trabajando juntos, y de una reflexión continua sobre dichas prácticas.
L’objectif de ce guide est de faciliter la planification et la mise en œuvre des
sessions de formation. Il fait partie du cours de Gestion d’entreprises associatives
rurales en agroalimentaire et a été conçu pour les facilitateurs qui possèdent
des connaissances et une expérience en ce qui concerne les aspects techniques de
la formation, mais qui n’ont pas forcément de compétences pédagogiques et qui
n’ont pas d’expérience leur permettant de faciliter le processus d’enseignementapprentissage.
Le rapport est construit en trois parties : • la première partie traite de l’adaptation des agricultures familiales aux changements climatiques et des conditions de l’adaptation ; • la seconde partie aborde la place de l’adaptation des agricultures familiales dans les politiques publiques ; • la troisième partie propose un certain nombre de recommandations en vue d’une meilleure intégration de cette question dans les politiques publiques. Une présentation des trois études de cas-pays est par ailleurs proposée en annexe.
El informe está estructurado en tres partes:
• la primera parte trata de la adaptación de la agricultura familiar a los cambios climáticos y de las condiciones de la adaptación; • la segunda parte aborda el lugar que ocupa la adaptación de la agricultura familiar en las políticas públicas;
• la tercera parte propone algunas recomendaciones para una mejor integración de este tema en las políticas públicas.
Una presentación de los tres estudios de caso-países figura también en anexo.
Projet pilote, l’initiative Adaptation Learning Program (ALP) ou Programme d’Apprentissage sur l’Adaptation au Changement Climatique, est mis en œuvre pour une durée de cinq ans (2010-2014) à l’échelle de quatre pays subsahariens : Ghana, Kenya, Mozambique et Niger. Cette phase est conçue et mise en œuvre par Care et ses partenaires dans le but de « Renforcer la capacité des ménages vulnérables en Afrique sub-saharienne à s’adapter à la variabilité et au changement climatique à travers une approche d’adaptation à base communautaire (ABC) ».
Pour parvenir à la sécurité alimentaire et réduire la pauvreté, les emplois décents sont essentiels. Souvent, dans les communautés rurales pauvres du monde entier, les hommes et les femmes sont entièrement tributaires de leur travail, qui est leur seule source de revenu, mais les emplois sont très précaires, peu rémunérés et les conditions de travail, parfois dangereuses. Plus de 85 pour cent des jeunes, soit environ 24 pour cent des travailleurs pauvres, vivent dans des pays en développement.