El PMC Maíz amarillo duro tuvo como objetivo principal que el país llegue a la autosuficiencia de manera competitiva, es decir que ya no dependa de las importaciones y que la demanda sea cubierta por la producción nacional con precios adecuados en relación a la oferta internacional, logrando al mismo tiempo mejorar la calidad de vida del agricultor y la rentabilidad para todos los actores de la cadena.
En este documento, encontraremos una explicación de cómo funcionó la alianza público privada como modelo de gestión en el Plan Semillas, complementado por una herramienta financiera, el fideicomiso, para habilitar un componente de financiamiento a pequeños productores. El Plan Semillas como APP ha sido un modelo no solamente exitoso, sino innovador. Ha producido beneficios económicos y sociales sostenibles para todos los actores del proyecto, contribuyendo a una sociedad ecuatoriana más inclusiva y más productiva.
La presente consultoría examina cualitativamente un compendio de lecciones aprendidas por parte de las cooperativas rurales del Ecuador, en su misión de atender las necesidades financieras de los productores agropecuarios. Tiene por objetivo realizar un estudio de las iniciativas de financiamiento productivo agropecuario de cuatro cooperativas de ahorro y crédito rurales, para extraer aprendizajes y propuestas de trabajo complementario con el nuevo Banco de Desarrollo Rural
Esta obra se base en los conocimientos y las experiencias de un grupo de administradores y evaluadores de 12 organizaciones, tanto nacionales como internacionales, que llevaron a cabo una serie de estudios de evaluación en Bangadesh, Cuba, Ghana, Nicaragua, Filipinas y Vietnam.
En este libro se sintetiza la experiencia de la CEPAL en los procesos de diagnóstico y formulación de estrategias orientadas al fortalecimiento de ocho cadenas de valor rurales en México, varios países de Centroamérica y la República Dominicana. El apoyo a estas cadenas fue posible gracias al financiamiento del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), en el marco del proyecto conjunto de la CEPAL y el FIDA denominado “Crecimiento inclusivo, política industrial rural y cadenas de valor participativas en América Latina y el Caribe”.
This event launches a new phase of the JP RWEE that will even further enhance its holistic approach to advancing rural women’s economic empowerment by integrating a climate resilience lens to tackle deep rooted social norms which limit women’s participation and leadership in rural communities including through applying gender transformative approaches.
The COVID-19 pandemic has elevated the importance of agriculture in the Pacific Islands for food security and economic development. The crisis has underscored the crucial role of domestic food systems to provide resilience to shocks, livelihood options, self-sufficiency, and insurance against food and nutrition insecurity. However, remoteness from international markets, populations dispersed across many small islands, heightened vulnerability to climate change, and natural resource constraints pose significant challenges for adapting food systems to cope with the impacts of COVID-19.
This case study presents an analysis undertaken for the IFAD-funded Agropastoral Value Chains Project in the Governorate of Médenine, Tunisia. High-resolution imagery makes it possible to track the development of roads, buildings, irrigation schemes, and other types of investments. Over 140 km of road constructed or rehabilitated by the project are easily detectable on satellite imagery.
Since 1981, IFAD has financed 19 rural development programmes and projects in Rwanda, for a total amount of US$358.04 million, and directly benefiting about 1,540,157 rural households. The IFAD country programme has contributed significantly to improving incomes and food security in rural areas, particularly through watershed development, increased production in marshland and hillsides, development of livestock and export crops, and support for cooperatives and rural enterprises. IFAD also supports the government in mainstreaming climate resilience.
Since 1979, IFAD has invested US$455.09 million in 20 programmes and projects in Kenya (at a total cost of US$980.31 million), in support of the Government’s efforts to reduce rural poverty. In Kenya, IFAD loans provide support to smallholders and value chain actors (such as agrodealers, private extension services, small traders and processors) in the dairy sector, aquaculture, livestock and cereal value chains. In addition, they strengthen the resilience of the natural resource base and improve access to rural financial services.