La herramienta "Creatividad e innovación” brinda a las personas participantes conocimientos teóricos y prácticos que les permitirán romper paradigmas y desarrollar ideas innovadoras, indispensables para impulsar el desarrollo sostenible de una comunidad y mejorar los procesos internos de una institución. Mediante interesantes ejercicios participativos, se explican las características del pensamiento lógico-lineal y del pensamiento creativo-lateral.
El propósito de esta herramienta es que las personas tomen conciencia de la forma diferente en que hombres y mujeres construyen su identidad, y que comprendan que dicha identidad es el resultado de un largo proceso de socialización.
Esta herramienta brinda a los participantes la oportunidad de entender la dinámica inherente de los conflictos, así como la manera de contribuir a su manejo constructivo mediante la utilización de instrumentos apropiados a ese fin. También se fortalecen sus habilidades para promover soluciones sostenibles, efectivas y eficaces a situaciones conflictivas que pueden obstaculizar el desarrollo local.
Esta herramienta permite la creación de una masa crítica de hombres y mujeres con capacidad de ubicarse en el futuro y planear sus acciones presentes con miras a alcanzar sus metas personales y de vincularse en el desarrollo de la comunidad y/o organización a la que pertenecen.
La herramienta sobre formulación, monitoreo y evaluación de proyectos se ha diseñado con el propósito de que los participantes puedan identificar oportunidades para el desarrollo de un proyecto y le den seguimiento a este tipo de iniciativas. Se muestra que los proyectos tienen un ciclo de vida, surgen alrededor de la identificación de un problema que se desea solucionar, pasan por la ejecución y evaluación y terminan probablemente con la generación del diseño de otro proyecto.
Esta herramienta busca mejorar los conocimientos y las capacidades de los participantes en el tema de la facilitación, con el objetivo de que ello les permita facilitar procesos de cambio en sus comunidades y/o instituciones. Lo anterior se logrará mediante reflexiones de los propios participantes, las cuales se basarán en sus vivencias y experiencias personales.
This paper sets out an analytical framework for doing research on the question of how to use agricultural research for innovation and impact. Its focus is the Research Into Use programme sponsored by the UK's Department for International Development (DFID). This is one example of a new type of international development programme that seeks to find better ways of using research for developmental purposes.
Over the last 10 years much has been written about the role of the private sector as part of a more widely-conceived notion of agricultural sector capacity for innovation and development. This paper discusses the emergence of a new class of private enterprise in East Africa that would seem to have an important role in efforts to tackle poverty reduction and food security. These organisations appear to occupy a niche that sits between mainstream for-profit enterprises and the developmental activities of government programmes, NGOs and development projects.
RIU is a research and development programme designed to put agricultural research into use for developmental purposes and to conduct research on how to do this. The programme is funded by the UK’s Department for International Development (DFID). It follows earlier investments by DFID in agricultural and natural resources research, supported through its renewable natural resources research strategy (RRNRRS). While this strategy delivered high-quality research, the uptake of this research and its impact on social and economic progress was modest.
Successful cases of innovation invariably demonstrate a range of partnerships, alliances and network-like arrangements that connect together knowledge users, knowledge producers and others involved in enabling innovation in the market, policy and civil society arenas. With this comes the realisation that public agricultural research needs to strengthen links to a wider set of players from the private and civil society sectors and, of course, farmers themselves. Public agricultural extension services have traditionally played the role of linking farmers to technology.