El objetivo de este trabajo ha sido caracterizar la evolución de la Extensión Rural de nuestro país en los últimos 30 años. Para ello, han sido analizadas las disertaciones, paneles, conferencias y trabajos presentados en las diferentes jornadas realizadas durante el periodo transcurrido desde 1983 hasta 2016.
“The empowerment of our organization was important, to realise our potential to access to finance, markets and to make bean cultivation more productive” expresses Moises Acosta, vice-president of the Honduran Seed Producers Network, “and the bean value chain is now being strengthened and made more sustainable.” He is one of the producers who CDAIS and partners work with in Olancho department, with results that are now being replicated across the country.
In an effort to raise incomes and increase resilience of smallholder farmers and their families in Feed the Future1 (FTF) countries, the United States Agency for International Development (USAID) funded the Developing Local Extension Capacity (DLEC) project. This project is led by Digital Green in partnership with the International Food Policy Research Institute (IFPRI), CARE International (CARE) and multiple resource partners.
“The CDAIS project brings an innovative methodology because it creates capacities in us as human beings” explains Carlos Valladares of the Intibucá Farmers Network. “This has improved our understanding of our situation, we have taken full responsibility for it, and are now better able to obtain and manage information to improve producer organizations”. Associations in the region have appreciated the spaces created by CDAIS that allow them to link with other stakeholders, find solutions to common problems, and now, to even take issues to the national policy level.
“We first needed to know who we are, what we offer, and how to offer it,” says coffee farmer Denis Cortez. “We in the partnership organized ourselves, and now all get involved in working for the common good. We are more aware of the impacts of what we do, how to improve quality, and apply on our farms what we learn such as new processing methods.” He is one of thousands of producers that CDAIS and its partners are working with in western Honduras, with clear results.
“Primero necesitamos conocernos para saber quiénes somos, qué es lo que ofrecemos y cómo ofrecerlo” dice Denis Cortez productor de café. Somos más conscientes del impacto de lo que hacemos, aplicamos en nuestras fincas lo que aprendemos como nuevos métodos de procesamiento para potenciar la calidad.” Él es uno de los miles de productores con los que el CDAIS y las organizaciones colaboradoras trabajan en el Occidente de Honduras, con resultados contundentes.
“Es importante el empoderamiento de la organización, conocer nuestro potencial para acceder a financiamientos y al mercado y lograr que el cultivo de frijol sea productivo.” expresa Moisés Acosta, vicepresidente de la Red de Productores Artesanales de Semilla de Honduras (Red Pash). “La cadena está siendo fortalecida para su sostenibilidad y relevo generacional”. Él es uno de los productores con los que CDAIS y sus socios trabajan en el departamento de Olancho, Honduras, con resultados que ahora se replican a nivel nacional.
“El proyecto CDAIS brinda una metodología innovadora porque crea capacidades en nosotros como seres humanos”, explica Carlos Valladares de la Red Hortícola de Intibucá. “Esto ha ayudado a que entendamos mejor nuestra situación y nos apropiemos de ella. Ahora somos capaces de obtener y manejar información para mejorar la organización de los productores”. Las asociaciones en la región han aprovechado los espacios creados por CDAIS para articular con otros actores, encontrar soluciones a problemas en común y ahora, incluso, llevar los problemas a nivel de política pública.
El proyecto “Alianza para la Creación de Oportunidades de Desarrollo Rural a través de Relaciones Agroempresariales” (ACORDAR por sus siglas en inglés) tuvo como objetivo contribuir a incrementar los ingresos, asegurar empleo permanente y fortalecer las capacidades comerciales de 7000 familias pobres del área rural de Nicaragua en 50 municipios, en alianza con los gobiernos municipales y el sector privado..
The objective of the study was to identify a viable trade-off between low data requirements and useful household-specific prioritizations of advisory messages. At three sites in Ethiopia, Kenya, and Tanzania independently, we collected experimental preference rankings from smallholder farmers for receiving information about different agricultural and livelihood practices. At each site, was identified socio-economic household variables that improved model-based predictions of individual farmers’ information preferences.