Argentine agriculture has undergone significant transformations over the past three decades. After a long period of stagnant production and productivity, starting in the early 1970s, a number of independent but interconnected events fostered a new technological cycle that induced rapid growth in cereals and oilseeds production. Zero tillage and the introduction of genetically modified soybean varieties were key elements of this change. Argentina reached a leading position across agricultural commodity markets.
This report assesses trends in investments, human resource capacity, and research outputs in agricultural R&D -excluding the private (for-profit) sector- in LAC. It is an update of Stads and Beintema (2009), covering a more complete set of countries and focusing primarily on developments during 2006-2012/2013.
Este capitulo es parte de un libro del proyecto Específico “Procesos socio-técnicos de innovación en los territorios” del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Argentina.
La R&D agricole considère aujourd’hui les innovations de terrain comme des sources d’idées et de références pour améliorer durablement les modes de production. La « traque de systèmes innovants » et l’évaluation de ces systèmes pour définir les plus performants du point de vue économique et agrienvironnemental nécessitent cependant un travail de mise au point méthodologique, auquel cet article vise à contribuer.
Los enfoques y prácticas de extensión se han transformado notablemente en las últimas décadas. A la vez, numerosos autores han señalado la persistencia de enfoques difusionistas tanto en las instituciones como en las prácticas de los extensionistas. En esta investigación se analizan las prácticas de extensión implementadas en el noreste argentino, se las compara con propuestas institucionales y académicas actuales y se extraen aprendizajes. Para esto se realizaron 40 entrevistas a extensionistas que trabajan en el ámbito público en las provincias de Chaco, Corrientes, Formosa y Misiones.
Existe hoy una preocupación creciente acerca de cómo los sistemas de monitoreo y evaluación permiten generar nuevos conocimientos para la comprensión no sólo de los efectos e impactos de una intervención sino también sobre la manera en que suceden los cambios. Este trabajo presenta la metodología de sistematización de experiencias, entendida como una estrategia multiactoral para evaluar intervenciones de desarrollo con énfasis en los procesos y las lecciones aprendidas.
Este trabajo reúne cuatro profundos estudios sobre cuestiones estratégicas del sector agropecuario, los alimentos y la agroenergía en el país, a partir de una mirada detallada del escenario internacional y el lugar de la Argentina en él. El momento de su lanzamiento no podría ser más oportuno. Hoy el mundo, y con él la Argentina, enfrentan el desafío de satisfacer la demanda creciente de alimentos y, al mismo tiempo, garantizar su acceso a cada vez más personas, sin poner en riesgo el desarrollo sustentable ni la seguridad energética.
La hidroponia o cultivo sin suelo es una técnica cuya importancia reside en su alta producción por metro cuadrado, gran eficiencia en el uso de agua y una multiplicidad de cultivos compatibles que brindan a los productores de zonas áridas y semiáridas una oportunidad interesante de producción (Birgi, 2015).
Se presenta un estudio de la dinámica de relacionamiento que tiene lugar en los procesos de aprendizaje en sistemas de innovación agroalimentarios regionales, y la manera en que INTA interviene en ellos. El estudio se enfoca desde la perspectiva institucional del evolucionismo, utilizando como herramienta el concepto de redes elaborado desde la sociología del conocimiento. Se pone en juego el sistema de ciencia, tecnología e innovación, en cuanto a su coordinación, conformación y a las políticas públicas que lo rigen.
El objetivo del trabajo es evaluar el impacto de la utilización del silobolsa, concentrándose fundamentalmente en el análisis de aspectos económicos de las innovaciones. Desde el punto de vista social, la innovación podría haber generado beneficios en un rango de 8,5 a 10 mil millones de dólares, permitiendo al productor primario reducir costos de transacción, integrarse verticalmente, aumentar las posibilidades de almacenaje e incrementar el valor de la producción de granos.