Multi-stakeholder partnerships network which is typified by the FARA-led Integrated Agriculture Research for Development (IAR4D) of the SSA-Challenge Program is an innovation platform (IP) composed of stakeholders bound together by their individual interests in a shared commodity or outcome. The result from such innovation platforms is largely influenced by the strength of the network. In this paper, similarities within and across platforms are assessed using the simple matching procedure. Results indicate consistency in conduct of Innovation Platform activities.
Grants for agricultural innovation are common but grant funds specifically targeted to smallholder farmers remain relatively rare. Nevertheless, they are receiving increasing recognition as a promising venue for agricultural innovation. They stimulate smallholders to experiment with improved practices, to become proactive and to engage with research and extension providers. The systematic review covered three modalities of disbursing these grants to smallholder farmers and their organisations: vouchers, competitive grants and farmer-led innovation support funds.
West Africa’s smallholders are dynamic and innovative and, if given the opportunity, could easily and sustainably double or treble their productivity. This would have a huge impact on the region’s food security and economic growth. The Convergence of Sciences programme has spent the past decade exploring new pathways for agricultural innovation that focus on enabling smallholders to capture opportunity.
Promover, apoyar y colaborar con el pequeño productor para incentivar su acceso a los mercados. Con este objetivo, dieciséis participantes de las diferentes áreas involucradas en la cadena productiva agropecuaria de la región de América Central y México compartieron sus experiencias e identificaron acciones y actores clave en el Seminario-Taller. A lo largo de tres días se conocieron diversas iniciativas que permitieron formular nuevos retos y conclusiones en torno a la cadena productiva.
La agricultura de América Latina y el Caribe (ALC) se enfrenta a una oportunidad global sin precedentes: satisfacer los patrones de consumo diferenciados y de mayor calidad de 7000 millones de personas en la actualidad y de no menos 9000 millones para el 2050. A esta oportunidad se suma el valor que le brinda la agricultura a las poblaciones rurales, no solo como su fuente alimentaria, sino también como su única o primordial fuente de ingresos. Y son los territorios rurales precisamente los llamados a prepararse, adaptarse y asumir el reto de alimentar al mundo.
Este texto presenta un recuento de los logros alcanzados mediante un conjunto de políticas públicas que se han aplicado a lo largo del tiempo en la Argentina, muchas de las cuales se continúan y coordinan en el marco del Programa Agricultura Inteligente. Esas políticas han permitido encontrar respuestas a preocupaciones como el aumento de la productividad, los efectos del cambio climático, el uso adecuado de los recursos fundamentales del agua y la tierra y la menor utilización de energías altamente contaminantes, entre otras.
L’agriculture familiale est le modèle d’exploitation le plus répandu en Europe. À ce titre, elle assure depuis des siècles la prospérité du secteur. L’ambitieux cadre stratégique mis en place par l’Union européenne a été conçu pour tenir compte des différents modèles d’agriculture qui coexistent sur son territoire, en ce compris les divers types d’agriculture familiale.
La reciente y continua volatilidad en los precios de los alimentos ha hecho tomar conciencia de la importancia de la Agricultura Urbana y Periurbana (AUP) como un importante recurso de la seguridad alimentaria y nutricional, tanto en términos del suministro de alimentos, como de generación de empleo e ingresos para la población de bajos recursos y por su contribución al equilibrio del desarrollo nacional y a un ambiente urbano más vivible.
Aujourd’hui encore, les forêts restent un enjeu vital. Ceci alors que le développement accéléré de beaucoup de régions provoque une pression croissante sur les écosystèmes forestiers. Parc Yasuni en Equateur, parc national des Virunga en RDC, ou plus largement forêts tropicales au Brésil ou en Indonésie, on peut multiplier les exemples de conflits socio-environnementaux où la question de l’utilisation et de la propriété des ressources forestières est l’objet de luttes féroces entre populations indigènes, ONG environnementales, multinationales et gouvernements, etc.
Descendu des hauts plateaux andins pour arriver dans nos assiettes, le quinoa est entré dans le jeu économique où l’offre, la demande et le prix forment un cadre triangulaire aux paradoxes multiples.