Esta herramienta permitirá a los actores de los movimientos de agricultura orgánica de los países diagnosticar el estado de sus sistemas nacionales de control de la producción orgánica (SNC) y elaborar, de manera participativay con el apoyo del IICA, planes de acción que fortalezcan las instituciones e instancias asociadas al control de la producción orgánica en el ámbito nacional, brindando así una mayor garantía de la calidad de este tipo de productos a los consumidores de los mercados nacionales e internacionales.
This tool will enable stakeholders in the countries’ organic agriculture movements to assess the functioning of national control systems (NCSs) for organic production and, with the assistance of IICA, to collaborate on the development of action plans to strengthen institutions and agencies involved in organic production control at a national level, thereby providing consumers in national and international markets with greater quality assurance for these types of products.
Rendir un informe anual del trabajo realizado por el IICA es más que un compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas; constituye también un medio para reconocer los avances de nuestros Estados Miembros en beneficio de sus pueblos. Los logros que ellos alcanzan gracias a los aportes que les brinda el Instituto los hace mantener su confianza en una organización que de hecho les pertenece.
El documento que presentamos fue pensado para que los técnicos, asesores, formadores, gestores, capacitadores, coordinadores o líderes, tanto de organizaciones rurales y asociaciones de productores, como de agencias de desarrollo –gubernamentales o de la sociedad civil― cuenten con un instrumento de apoyo para desarrollar unidades pequeñas de producción y de servicios rurales en una región parcular.
Este documento dentifica y tipifica diferentes estrategias y mecanismos innovadores que han sido aplicados en distintos escenarios para aumentar la cobertura y facilitar el acceso de los agricultores familiares a esos servicios, los que pueden servir de referencia para otras iniciativas que se quieran impulsar en ese sentido, bien sea para mejorar la calidad y eficiencia, o para aumentar la oferta de esos servicios.
De octubre del 2014 a noviembre del 2016, el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) y la Coordinadora Latinoamericana y del Caribe de Pequeños Productores y Trabajadores de Comercio Justo (CLAC) ejecutaron el proyecto “Fortalecimiento de capacidades agroempresariales y asociativas de organizaciones de pequeños productores para su vinculación a los mercados locales utilizando el modelo de agronegocios de comercio justo”, con recursos del Fondo de Cooperación Técnica del IICA (FonCT)1 y la CLAC2 .
Como parte del proyecto insignia del IICA “Productividad y sustentabilidad de la agricultura familiar para la seguridad alimentaria y la economía rural” se realizó un ejercicio participativo para identificar y validar innovaciones que contribuyan a la mejora de los sistemas de agricultura familiar.
Este instrumento busca contribuir con los países al proceso de formulación de políticas públicas diferenciadas para la agricultura familiar, basado fundamentalmente en la construcción participativa, involucrando a los actores sociales y los agentes públicos en la gestión de su propio desarrollo, considerando la viabilidad técnica y política a las decisiones tomadas y a la implementación de soluciones.
La agricultura de América Latina y el Caribe (ALC) se enfrenta a una oportunidad global sin precedentes: satisfacer los patrones de consumo diferenciados y de mayor calidad de 7000 millones de personas en la actualidad y de no menos 9000 millones para el 2050. A esta oportunidad se suma el valor que le brinda la agricultura a las poblaciones rurales, no solo como su fuente alimentaria, sino también como su única o primordial fuente de ingresos. Y son los territorios rurales precisamente los llamados a prepararse, adaptarse y asumir el reto de alimentar al mundo.