Despite the key role of actor networks in progressing new sustainable technologies, there is a shortage of conceptual knowledge on how policy can help strengthen collaborative practices in such networks. The objective of this paper is to analyze the roles of such policies – so-called network management – throughout the entire technological development processes.
This article conceptualizes the diffusion of user innovations from a service ecosystem perspective. With the focus on sustainable innovations, the service ecosystem is evaluated, along with other systemic innovation concepts, as a possible theoretical basis for explaining the first adoption and diffusion of user innovations.
This study identifies systemic problems in the New Zealand Agricultural Innovation System (AIS) in relation to the AIS capacity to enact a co-innovation approach, in which all relevant actors in the agricultural sector contribute to combined technological, social and institutional change. Systemic problems are factors that negatively influence the direction and speed of co-innovation and impede the development and functioning of innovation systems. The contribution in the paper is twofold.
La literatura de los intermediarios que participan en el proceso de innovación les atribuye la capacidad de cerrar brechas y disminuir los costos de transacción entre actores exploradores y explotadores de conocimiento, siendo esta interacción vital para que exista un sistema de innovación. Sin embargo, no hay un consenso en la literatura respecto al impacto real de los intermediarios en el sistema en el que actúan.
Con el objetivo de proponer lineamientos conceptuales para un sistema de innovación y co-producción de tecnología a fin de coadyuvar en la planeación, evaluación y fortalecimiento institucional de la extensión rural en la Ciudad de México (cdmx), se evaluó la experiencia de 35 campesinos, 7 extensionistas, 3 funcionarios de gobierno y 2 coordinadores de una organización Sistema-Producto en Milpa Alta, Xochimilco y Tláhuac, durante 2015.
La cadena productiva incluye la tecnología y el saber-cómo utilizarla eficientemente (know-how). También existe la cadena de “suministro” que complementa la cadena productiva, donde se integra la actividad de los proveedores de materiales y servicios a la producción, la distribución de los productos o servicios terminados y su compra por los clientes. La cadena de suministro incluye la coordinación entre suministradores, intermediarios y clientes. En esencia, integra las actividades de suministro y demanda, dentro y fuera de las compañías.
Las cadenas de valor juegan un papel importante en la economía global. Sin duda alguna, el análisis de cadenas de valor se ha concentrado en cadenas globales y nacionales más que en cadenas regionales de valor. Sin embargo, en muchos casos estas últimas constituyen la base principal de acceso y articulación con los mercados internacionales. Las cadenas globales de valor tienen su base en los grandes núcleos regionales de crecimiento económico e integración: América del Norte, Asia y Europa.
El estudio de cadenas de valor constituye una herramienta adecuada, ya que además de detectar los llamados cuellos de botella, posibilita visualizar todas las relaciones que intervienen desde que surge el producto hasta que llega al consumidor final. Esto no sólo atañe al flujo productivo propiamente, sino abarca además un conjunto de actores que conforman el marco institucional y organizacional y por lo tanto inciden directa o indirectamente en el propio proceso de la cadena.
El valor de la producción agroalimentaria del estado de Puebla ocupa el sexto lugar a nivel nacional. Sin embargo, los beneficios para los productores de hortalizas de la región no han sido los esperados en gran medida debido al intermediarismo y ausencia de análisis relacionados a la cadena de valor, logística y cadena de suministro. El presente estudio recopiló la información de algunos agentes que participan en la cadena de valor de la producción- comercialización de hortalizas en cuatro municipios del Distrito de Desarrollo Rural de Tecamachalco, Puebla, México.
El propósito del análisis presentado en este documento es estudiar algunos elementos en el contexto de unas cadenas (tomate y pepino) y un sector económico (hortalizas) priorizados por el Gobierno de la República de El Salvador. Esto se ha logrado gracias a la aplicación piloto de una herramienta cuantitativa desarrollada por el departamento de Desarrollo Económico y Social (ES) de FAO en Roma. Cabe destacar que este análisis no pretende ser un estudio exhaustivo de la cadena del tomate y pepino en el país sino que un ensayo para demonstrar el potencial de la herramienta.